


¡Mira! ahí viene Justino con Manchas.





- ¡Hola Justino! Hola Manchitas precioso, ¿para dónde van?
- Hola Esperanza, saqué a Manchas a dar una vuelta. ¿Qué haces?
- Estaba escuchando a mis papás hablar con mi abuela Elvira sobre la JEP, pero no les entendí bien.
- ¿Por qué? ¿De qué hablaban?



- Decían que se van a acreditar como víctimas ante la JEP, porque quieren que se haga justicia. ¿Cómo así?
- Ah, yo te puedo explicar, Esperanza. En casa nosotros estamos haciendo lo mismo. Mi papá y mis tíos fueron a la JEP para que nos reconozcan como víctimas del conflicto.
- Sí, yo escuché eso mismo. ¡Cuéntame qué significa!
- Las víctimas somos las personas que resultamos afectadas por el conflicto que vivió Colombia. A algunos nos quitaron nuestras fincas, o lastimaron a nuestra familia, o pasamos por cosas difíciles por la guerra. Somos víctimas por todo lo que vivimos, pero también tenemos derechos a que nos digan la verdad, a que haya justicia y a que esas cosas no se repitan.




- Y, ¿qué tiene que ver la JEP?
- Allá en la JEP nos escuchan contar lo que nos pasó y, al mismo tiempo, buscan que quienes nos hicieron daño, cuenten lo que nos hicieron y ayuden a restaurar nuestras vidas.
- Pero ¿qué es eso de acreditarse?
- Acreditarse significa que la JEP reconoce que somos víctimas y es por eso que nos invitan a participar en todos los espacios en los que se hable del daño que nos hicieron.





- Y, ¿todos nos podemos acreditar para poder participar?
- Sí, claro. Pero eso es un proceso que sólo pueden hacer nuestros papás, abuelos... ¡Los grandes! Las niñas y los niños no los podemos hacer solos. Y lo puede hacer cada quien o en grupo, con otras personas que también hayan sido víctimas.
- Mmmm. ¿Y cómo sabe uno qué debe hacer?
- Pues uno puede ir a la JEP, llamar por teléfono o puede entrar a la página web. Ahí le dicen a uno.




- Bueno, yo creo que mi abuelita y mis papás ya hicieron eso porque nosotros vamos a unas reuniones allá.
- ¡Vea pues! Creo que tu familia, al igual que la mía quiere participar y ser escuchada.
