COMUNICADO 119

La JEP califica como perfidia el ataque con el ‘burro-bomba’ cometido por las Farc-EP en Chalán (Sucre)


  • La recalificación de este caso se da teniendo en cuenta que el crimen de guerra de perfidia se consolida cuando hay un engaño planeado para buscar la ventaja frente al enemigo en un conflicto armado.
  • La Sección de Apelación del Tribunal para la Paz declaró no amnistiable este hecho y remitió el caso de Gilberto Jiménez Borja, exintegrante del Frente 35 de las extintas Farc-EP, a la Sala de Definición de Situaciones Jurídicas.

Bogotá, 10 de octubre de 2023. La Sección de Apelación de la Jurisdicción Especial para la Paz calificó como perfidia el ataque cometido por las extintas Farc-EP con un ‘burro-bomba’ en Chalán (Sucre), el 12 de marzo de 1996. En ese hecho murieron 11 integrantes de la Policía en un episodio en el que utilizaron 50 kilos de explosivos camuflados en una carga de plátanos que transportaba el animal.

El delito de perfidia es una infracción al Derecho Internacional Humanitario y es calificado como un crimen de guerra en el cual se utiliza el engaño para obtener una ventaja sobre un enemigo en el marco de la guerra o de un conflicto armado.

Según la Sección de Apelación, la perfidia en este caso se constituyó por la planeación del engaño para la utilización de un menor de edad integrante de las Farc-EP y de un animal reconocido en el pueblo para transportar los explosivos sin despertar sospechas entre los integrantes de la Policía.

Este ataque incluyó no solo la detonación a control remoto de los explosivos, sino también una posterior confrontación armada. Inicialmente, murieron siete uniformados y posteriormente cuatro integrantes de la Policía indefensos, que habían huido hacia el cementerio, fueron ejecutados por los guerrilleros. Los policías se habían rendido después de que se les acabó la munición. Además, los cuerpos de dos uniformados fueron incinerados en la estación de Policía.

De acuerdo con lo que pudo establecer la JEP, días antes del ataque, integrantes de ese frente grabaron la estación y las edificaciones aledañas, ubicadas en el centro del municipio, y elaboraron un croquis de la zona. Asimismo, envenenaron a cinco perros que custodiaban las instalaciones de la Policía para evitar que con sus ladridos advirtieran la presencia de extraños en el lugar, con lo cual se prueba que el ataque fue un acto planeado.

Esta decisión se conoce en el proceso de solicitud de amnistía de un compareciente quien hizo parte del Frente 35 de las extintas Farc-EP y fue condenado a 26 años de prisión por rebelión y homicidio múltiple agravado.

Gilberto Jiménez Borja se acogió a la JEP en 2018 y solicitó los beneficios de libertad condicionada y la amnistía por homicidio en persona protegida. Fruto del estudio de este caso, la Jurisdicción determinó recalificar el delito de homicidio múltiple por el de crimen de guerra de perfidia y ordenó enviar su caso a la Sala de Definición de Situaciones Jurídicas para que resuelva de manera definitiva su situación ante la JEP.

Asimismo, la Sección de Apelación remitió la decisión a la Sala de Reconocimiento para que estudie la participación del menor de edad, quien fue usado por esa extinta guerrilla para transportar los explosivos escondidos en el ‘burro-bomba’, en el marco del Caso 07, que investiga el reclutamiento y utilización de niñas, niños y adolescentes por parte de las Farc-EP en el conflicto armado.