COMUNICADO 153
Por segunda vez se aplaza el inicio del Juicio Adversarial contra el coronel (r) David Herley Guzmán Ramírez, quien nuevamente revocó a su defensa cinco días antes de la audiencia
- Tras negar responsabilidad, el oficial fue acusado de asesinatos y desapariciones forzadas ilegítimamente presentadas como bajas en combate en Dabeiba, Antioquia. El proceso comprende 10 hechos representativos y 18 víctimas, entre ellas tres menores de edad, una de ellas mujer.
- De acuerdo con el Escrito de Acusación, las víctimas eran jóvenes campesinos, desempleados o trabajadores informales, en condición de vulnerabilidad. Algunos habían sido reclutados o se habían desmovilizado; otros fueron señalados falsamente como milicianos.
- Este es el segundo aplazamiento consecutivo del juicio. Durante el trámite, Guzmán Ramírez ha cambiado de defensa en cuatro ocasiones.
- La Sección de Ausencia de Reconocimiento de Verdad de la JEP adoptó medidas adicionales para asegurar la instalación y desarrollo del Juicio Adversarial Transicional contra el coronel en retiro, señalado como máximo responsable de crímenes de guerra y de lesa humanidad en el marco del conflicto armado.
Bogotá 24 de septiembre de 2025. Por segunda vez, la Sección de Ausencia de Reconocimiento de Verdad del Tribunal para la Paz tuvo que aplazar el inicio del Juicio Adversarial contra el coronel (r) David Herley Guzmán Ramírez, acusado ante esta instancia de la JEP como presunto máximo responsable de asesinatos y desapariciones forzadas perpetradas en el cementerio Las Mercedes de Dabeiba y en otros cementerios municipales de Antioquia.
La magistratura adoptó esta decisión porque, a solo cinco días hábiles de la instalación del juicio, Guzmán Ramírez revocó el poder a su abogada defensora, lo que impidió la realización de la audiencia. A esta diligencia ya habían confirmado su asistencia todas las partes procesales: la Unidad de Investigación y Acusación (UIA), las víctimas y sus apoderados, el Ministerio Público, así como los equipos judiciales de la JEP.
Este es el segundo aplazamiento consecutivo del proceso, que llegó a la vía del Juicio Adversarial Transicional después de que el compareciente decidió no reconocer responsabilidad por crímenes de guerra y de lesa humanidad. El primero se dio cuando su defensa pidió una prórroga para preparar el caso. La magistratura aceptó la solicitud y reprogramó las audiencias del 9, 10 y 11 de septiembre, para el 29 y 30 de septiembre y 1 de octubre.
Durante el trámite, Guzmán Ramírez ha cambiado de defensa en cuatro ocasiones. Tras la revocatoria más reciente y la consecuente falta de representación, la magistrada Reinere Jaramillo Chaverra, ponente del caso, le ordenó al Sistema Autónomo de Asesoría y Defensa de Comparecientes designarle dos defensores, uno con sede en Medellín y otro en Bogotá, para garantizar el inicio del juicio el 29, 30 y 31 de octubre en Medellín.
En ese sentido, la Sección de Ausencia de Reconocimiento de Verdad advirtió en su decisión que no se admitirán nuevas dilaciones en el trámite judicial y, por ello, adoptó medidas para garantizar que, una vez instalado, el juicio avance sin contratiempos hasta su finalización, en cumplimiento del principio de estricta temporalidad que rige todos los procesos de la JEP.
¿Porqué el coronel (r) David Herley Guzmán enfrenta un Juicio Adversarial Transicional?
Después de negarse a reconocer responsabilidad por asesinatos y desapariciones forzadas presentadas ilegítimamente como bajas en combate en Dabeiba (Antioquia), la Unidad de Investigación y Acusación (UIA) —que actúa como fiscalía de la JEP— lo acusó ante la Sección de Ausencia de Reconocimiento de Verdad, que abrió el Juicio Adversarial Transicional.
En diciembre de 2024, tras las etapas de indagación e investigación, la UIA presentó acusación formal contra Guzmán Ramírez como coautor de ocho hechos representativos y coautor mediato en dos crímenes cometidos por las AUC, todos calificados como crímenes de guerra y de lesa humanidad. El caso comprende 10 hechos representativos y un total de 18 víctimas, entre ellas tres menores de edad, una de ellas mujer.
El coronel (r) Guzmán Ramírez es procesado por un patrón de macrocriminalidad: asesinatos y desapariciones forzadas sistemáticas y encubiertas, que habrían sido perpetrados por el Batallón de Contraguerrillas 79 que tuvo bajo su mando entre agosto de 2004 y noviembre de 2005 en Dabeiba e Ituango (Antioquia).
De acuerdo con el Escrito de Acusación, las víctimas eran personas en condición de vulnerabilidad presentadas ilegítimamente como bajas en combate. La mayoría eran jóvenes campesinos, desempleados o trabajadores informales. Algunos habían sido reclutados o se habían desmovilizado, mientras que otros fueron señalados falsamente como milicianos.