COMUNICADO CONJUNTO 15
Una familia de Santa Ana, Magdalena,
recibió los cuerpos de dos seres queridos desaparecidos hace 15 años
- Éder Honak Durán Ortíz y Jhon Eduar
Miranda Durán, desaparecidos desde enero del 2008, fueron hallados en el
‘cementerio alterno’ del municipio de El Copey (Cesar).
- La Unidad de Búsqueda de Personas dadas
por Desaparecidas (UBPD) y la JEP entregaron a sus familiares los cuerpos el
pasado mes de julio.
Barranquilla, Atlántico, 4 de septiembre
de 2024. Con la promesa de una oferta laboral y la esperanza de mejorar sus
condiciones de vida, los jóvenes Éder Honak Durán Ortiz y Jhon Eduar Miranda
Durán, tío y sobrino, ambos de 22 años, partieron de sus hogares en Santa Ana,
Magdalena, rumbo a Valledupar el 16 de enero de 2008. Desde entonces, la
familia Durán no tuvo más noticias de ellos hasta el pasado mes de julio,
cuando, a partir de la información proporcionada por la JEP y la UBPD, pudieron
darles una digna sepultura.
Éder y Jhon eran inseparables. Desde muy
pequeños compartían la devoción por la pelota. Para ellos, cualquier día, bajo
el sol o la lluvia, era perfecto para correr detrás del balón. Las polvorientas
calles de su natal Santa Ana fueron el escenario de incontables partidos de
fútbol que jugaban con sus amigos, entre los que se encontraba su vecino Deiver
Yesid Martínez Padilla. Estos momentos en la cancha afianzaron su amistad y
forjaron recuerdos imborrables de una infancia llena de alegría, que quedaron
grabados en la memoria de quienes los conocieron.

Cuando Eder cumplió 14 años, una
invitación despertó en él un gran interés: formarse como árbitro. “Eran mis
amigos de la infancia y el fútbol era la mejor excusa para vernos. Un día, un
director técnico nos preguntó si estábamos interesados en ser árbitros. A Eder le
sonó la idea e inició su capacitación como juez. Un día me comentó que un
desconocido le había hecho una oferta de trabajo a él, a su sobrino Jhon y a
Deiver Yesid, en Valledupar. Después me enteré de que habían viajado. No supe
más de los tres”, expresó un amigo de los jóvenes, quienes fueron desaparecidos
forzadamente.
Según una hermana de Jhon Eduar, el
muchacho le comentó sobre la oportunidad laboral que le habían propuesto días
antes de hacer el viaje. Aunque fue una noticia inesperada, la familia entendía
que el joven deseaba un cambio en su vida, mejores ingresos y retomar sus
estudios, que había suspendido debido a la difícil situación económica del
hogar. Tras perder contacto con él, su mamá comenzó a tocar las puertas de
varias entidades que le ayudaran a ubicarlo. La búsqueda se convirtió en su
obsesión hasta que recibió una llamada anónima. Al otro lado del teléfono, un
desconocido la amenazó, le dijo que Jhon Eduar estaba bien, que era mejor dejar
las cosas así, que no se ganara un problema.
Hallazgo de los cuerpos y entregas dignas
Para que la familia Durán comenzara a
conocer la verdad sobre lo ocurrido con Éder y Jhon, fue determinante la
intervención forense en el ‘cementerio alterno’ de El Copey (Cesar), realizada
el 31 de mayo de 2022 por la UBPD, en el marco de la medida cautelar adoptada
por la JEP. La decisión fue tomada por el magistrado Óscar Parra, de la Sala de
Reconocimiento, en el marco del Subcaso Costa Caribe - Caso 03, que investiga
asesinatos y desapariciones forzadas presentados como bajas en combate.
“Este cementerio es un lugar donde se
atraviesan muchas de las violencias del conflicto. Cerca de 300 personas dadas
por desaparecidas permanecen allí. Por eso, en 2021, la JEP decidió adoptar medidas
cautelares para protegerlo, lo cual fue crucial para que no se removieran
bóvedas. Asimismo, para que no se rompieran estructuras y se preservaran los
cuerpos de personas dadas por desaparecidas. Después de darse esto, inició la
identificación de algunos de ellos”, informó el magistrado Parra a los
familiares de las víctimas.
El Sistema Integral para la Paz llegó al
‘cementerio alterno’ de El Copey tras las solicitudes de intervención
presentadas por los familiares de varias víctimas, entre ellos los de Eder y
Jhon. Sus seres queridos solicitaron la búsqueda el 7 de febrero de 2023 ante
la Territorial Atlántico de la UBPD. Durante su participación en diversos
espacios, aportaron información sobre las desapariciones y conocieron los
avances del trabajo forense realizado en el cementerio.
Hoy, por cuenta del proceso judicial, las
familias saben que las víctimas fueron engañadas con falsas promesas de trabajo
y falsamente acusadas de extorsionistas, lo que llevó a su asesinato a manos de
miembros del Gaula Militar Cesar. “Este caso es considerado paradigmático
debido al tipo de vulnerabilidad que presentaban muchas de las víctimas, lo que
las convirtió en objetivo de sus victimarios para ser ejecutadas
extrajudicialmente”, afirmó el magistrado Parra durante la ceremonia de entrega
digna, que busca honrar la memoria de quienes ya no están.

Por su parte, Ella Cecilia Del Castillo,
coordinadora de la Territorial Atlántico de la UBPD, informó que la medida
cautelar ha permitido la recuperación de 52 cuerpos que podrían ser víctimas
del conflicto. De estos, 6 han sido identificados y entregados a sus familias
en diferentes regiones del país. Del Castillo destacó que estas acciones forman
parte del trabajo coordinado entre las instituciones del Sistema Integral para
la Paz y expresó que estas entregas dignas ayudan a aliviar el sufrimiento de
los familiares y contribuyen a la construcción de la verdad sobre lo que
ocurrió con las personas desaparecidas en esta región.
El municipio de El Copey forma parte del
Plan Regional ‘Del Ariguaní al Río Magdalena’ de la Unidad de Búsqueda de
Personas Dadas por Desaparecidas. Según los registros de la entidad, allí se
reportan 201 solicitudes en la zona, con un total de 1.096 personas dadas por
desaparecidas.